
Pasajeros del transporte público del municipio de Naucalpan se sienten inseguros cuando vendedores de dulces suben a las unidades, pues se sienten amedrentados, ya que éstos más que ofrecer sus productos, les exigen dinero.
De acuerdo con los usuarios del transporte público, la zona en donde más ocurren este tipo de incidentes es en el paradero de Cuatro Caminos a Naucalpan, y es en la avenida Primero de Mayo en donde más vendedores suben a las unidades.
“Acá tocando puertas y abriendo corazones para que lleguen a esas hermosas bendiciones. Una moneda que nos quieras regalar, sea chica, sea grande. Dios me los bendiga, éxito para todos, bendiciones”, es el discurso pasivo-agresivo de los vendedores.
Los pasajeros mencionan que hay quienes suben a vender dulces, mientras que otros sólo suben a pedir dinero.
“Hay algunos que les compramos más que nada por el miedo de que nos asalten”, indicó uno de los pasajeros.
Otros mencionan que el discurso que estos vendedores les dicen es amenazante, insinuando que si “no es por la buenas, es por las malas”.
“Aquí en la Primero de Mayo hay mucho vendedor de dulce, pero prácticamente se suben a amenazar y la gente se siente obligada a comprar, pues como dicen, si no es por las buenas, pues por las malas”, explicó otra pasajera.