¿Regalarás una tableta o celular a tu hijo? Especialistas recomiendan pensarlo dos veces
Cada frase, comportamiento y regalo que dedicas a tus hijos es muy trascendente, en especial en aquellos que tienen 7 o menos años.
Con esto en mente, ¿permitirías que los Reyes Magos les regalaran algo que afecte negativamente su desarrollo mental, lingüístico y socioemocional?
Los dispositivos móviles y las pantallas interactivas están arraigadas en la vida diaria de los niños y niñas. Los pequeños son “nativos digitales” al nacer y crecer en un entorno digital que es potenciado por los teléfonos móviles y las tabletas, dispositivos que han revolucionado el aprendizaje, la comunicación y la difusión de información.
Pero investigaciones recientes indican que el uso de pantallas puede tener efectos adversos graves en la salud de los niños a largo plazo, aumentando la probabilidad de que los niños se vuelvan obesos, experimenten problemas de conducta, tengan irregularidades en el sueño, bajo rendimiento académico, entre otras graves afectaciones.
Un estudio de enero de 2023 encontró que el uso de pantallas pueden mejorar la educación y el aprendizaje; sin embargo, pasar demasiado tiempo frente a una se relaciona con un peor funcionamiento ejecutivo y rendimiento académico.
El análisis del estudio “Efectos por el tiempo en exceso de pantallas en el desarrollo de las infancias”, realizado por investigadores del área de Pediatría del Instituto de Ciencias Médicas e Investigación en Kuppam, India, encontró que el uso excesivo de la pantalla tiene efectos perjudiciales sobre el crecimiento social y emocional, incluido un aumento en la probabilidad de obesidad, trastornos del sueño y afecciones de salud mental, como depresión y ansiedad.
Además, puede obstruir la capacidad de interpretar emociones, alimentar conductas agresivas y dañar la salud psicológica en general.
“Establecer límites, utilizar controles parentales y demostrar un buen comportamiento ante la pantalla son técnicas que los padres pueden utilizar para gestionar el uso de la pantalla por parte de sus hijos”, dice la investigación. “Podemos reducir los posibles impactos negativos del tiempo excesivo frente a la pantalla y promover el desarrollo saludable y el bienestar de los niños aumentando el conocimiento y fomentando actividades alternativas que estimulen su desarrollo”.
“El tema es fundamental para el desarrollo de los más pequeños, ya que su contacto con las pantallas no debe pasar de media hora, si tienen entre 2 y 5 años, y hasta una hora a partir de esa edad”, aconseja la pediatra Diana Guerrero. “Se entiende que sea una herramienta que muchos papás valoran, pero su uso debe vigilarse y, más importante, controlarse”.
RECOMENDACIONES
La especialista del Hospital Infantil de México Federico Gómez da algunas recomendaciones para reducir los impactos de utilizar las pantallas: contrario a lo que se suele hacer, entre más oscuro es el ambiente menos brillante debe estar la pantalla, “para evitar que su luz azul afecte el sueño, y siempre debe apagarse cualquier dispositivo al menos una hora antes de ir a la cama”.
Conseguir que un niño no se vincule con un dispositivo pasa por ofrecer actividades que le atraigan y lo motiven, realizadas preferentemente con papá y mamá.
“Armen rompecabezas o jueguen con los medios que tienen en casa. La convivencia cotidiana fortalece los vínculos familiares, promueve el diálogo y desarrolla el lenguaje de manera natural”, dice la Urgencióloga Pediatra. “Salir al parque o jardín más cercano a lanzarse por la resbaladilla, andar en bicicletas de balance o lanzar el disco o simplemente correr es mucho más benéfico para ellos que pasar una hora frente a un teléfono”.
Aprender canciones con ellos, leer o simplemente conversar sobre sus temas y a su ritmo son actividades que favorecen el desarrollo de su cerebro y mejoran su uso del lenguaje y su concentración y comprensión lectora.
