Cámaras de seguridad captaron el momento en que una llanta se soltó de una unidad de transporte público y golpeó a un hombre de la tercera edad en la cara.
Un adulto mayor sufrió un grave accidente mientras intentaba ingresar a su taxi, en el estado de Chiapas. Cámaras de seguridad de Tuxtla Gutiérrez captaron el momento exacto en que una llanta se zafó de un vehículo que circulaba a alta velocidad, rebotó por varios metros, hasta dar con el rostro del abuelito.
Abuelito es golpeado por llanta voladora
Las primeras versiones indican que la llanta salió expulsada de una unidad de transporte público de la Ruta 73, mientras circulaba en la 9ª Sur, entre 5 y 6 Oriente. De acuerdo con la fecha de la grabación, el incidente ocurrió el pasado 22 de octubre, pero fue hasta ahora que se viralizó en redes sociales.
La rueda rebotó por varios metros y, de manera inesperada, golpeó directamente el rostro del hombre de la tercera edad, quien perdió el equilibrio de inmediato. Al ser impactado, soltó su bastón y cayó en la acera.
El impacto fue tan fuerte que el hombre tuvo que recibir atención médica de urgencia y fue hospitalizado a causa de las lesiones. Aunque el estado de salud del afectado no ha sido confirmado por las autoridades, el incidente ha generado una gran preocupación sobre la seguridad vial y el estado de los vehículos de transporte público en la zona.
¿Qué hacer si una llanta se zafa del vehículo en movimiento?
La pérdida de una llanta mientras se circula a alta velocidad es un grave riesgo para cualquier conductor. Según expertos en automovilismo, como el creador de contenido especializado Velocidad Total, el principal peligro radica en la pérdida de control del vehículo. El volante tiende a desviarse hacia el lado donde se ha perdido la rueda, lo que puede causar un accidente fatal si el conductor no actúa rápidamente.
Si te encuentras en esta situación, es crucial mantener el control del volante con firmeza para evitar que el vehículo se desvíe del carril. Además, se recomienda no frenar bruscamente, sino reducir la velocidad de manera gradual, para minimizar el riesgo de volcarse o perder el control del vehículo.