«Ya estaba hasta la madre de ella», fueron las palabras que Pedro le dijo a su hijo después de asesinar a una mujer y pedirle que le ayudara a sepultarla en el poblado de Santa María Nativitas en el municipio de Calimaya.
Jesús acudió al inmueble ubicado en la calle Fernando Muciño Poniente después de recibir una llamada de su padre quien le pidió acudir al lugar para entregarle una propiedad, indicó una fuente oficial consultada.
Sin embargo, luego de firmar unos documentos lo llevó a un predio aledaño en el que había cavado una fosa para enterrar a María Asunción envuelta con una cobija de color blanco con cafe, de acuerdo con los reportes.
El hombre le dijo a su papá que pediría ayuda; sin embargo, alertó a los elementos de seguridad pública, quienes acudieron al sitio y detuvieron al presunto responsable que llevaba una arma de fuego a bordo de una camioneta.
A través del área de feminicidios, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México tomó conocimiento e inició una carpeta de investigación para determinar con toda exactitud el móvil con los testimonios del asegurado.